El trauma de los Cake Pops y cositas de Halloween

¡Buenos Días desde la cocina!

Si, si, desde la cocina, que toca hablar de recetitas, o al menos de recetas teóricas que en la práctica son un desastre...
Llevaba tiempo dándole vueltas al tema de los CakePops, y cuando vi esta receta de Alma, tan bonitos y tan 'sencillos' y pensé en mi festa de halloween, decidí que era el mejor momento para lanzarme a probar.

Imagen de www.objetivocupcake.com

Menuda idea tan peregrina...
La teoría es sencilla (no pongo recetas porque hay mil en Internet, quiero centrarme en los problemas):
- Haces un bizcocho
- Lo picas y lo haces migas
- Esas migas las mezclas con algún tipo de frosting (ya sea buttercream, Nutella, queso de untar...)
- Haces bolas y las enfrías
- Las pinchas en un palo
- Las cubres con cobertura y las decoras como te guste

Vaya caos, para empezar en la fiesta de Halloween no las pude sacar, ya que me dieron un montón de problemas y no me iba a dar tiempo a terminar, así que las guardé en la nevera y las deje para intentar terminarlas al día siguiente.

Todo el proceso fue bien, hasta que llegó el momento de ponerles el palo y cubrirlas de chocolate.

El primer problema fue 'pegar' los palos, el teoría, metes el palo en la cobertura y después lo pinchas en la bola y esperas a que el pegotito se seque para que haga de pegamento:

Imagen de virginiasar.blogspot.com

Pues bien, esto y no poner nada es lo mismo, la bola se cae. No se si es que otras coberturas tienen más consistencia que las que yo usé, pero a mí las bolas se me caen si las pongo hacia abajo.
Solución: Ninguna, tener cuidado y no sacudir mucho el palo.

Mi siguiente problema llegó con el recubrimiento, se supone que metes la bola en la cobertura y le das vueltas para que se tape por completo y como la cobertura es líquida, va escurriendo.
Y he aquí mi sorpresa cuando descubro que mi cobertura (que es de la archifamosa marca Wilton y que me costó una pasta) tiene la consistencia de la masilla de las paredes, y claro, en lugar de quedar bolas lisitas, quedan como si les hubieses puesto un chicle masticado por encima...ideal vaya.

Después de mucho mirar por Internet, descubrí que no soy la única que odia la cobertura de Wilton, y que la solución era mezclarlo con una sustancia grasa (aceite de girasol o mantequilla) para darle una textura líquida y poder trabajarla.

Una vez que tenía la cobertura líquida, llegó el momento de meter las bolas...más problemas: las bolas se me caen dentro (consecuencia del problema 1), mis bolas no son perfectas y se marcan todos los defectos (¿las hacen con un molde?), la cobertura clarea y se ve el bizcocho por debajo (De hecho las bolas blancas llevan dos capas de cobertura), y el problema más gordo de todos...las bolas se destruyen, se parten y se caen por el palo...

He seguido leyendo, y el problema de la rotura es debido a la mezcla bizcocho-frosting, ya que si las proporciones no son las adecuadas, la consistencia de las bolas se viene abajo. Así que tendré que revisar otras recetas para dar con la proporciones...porque como veis tuve algunos desastres...

El remate ya ha sido la decoración. Supuestamente iba a pintar caritas de calabaza en las naranjas y caras de Jack Skeleton en las blancas...pero otro error, mi rotulador comestible no pinta, hace surcos...así que se han quedado sin decorar.

Las únicas que me han quedado como quería son los de purpurina negra, que están bastante bien, los otros, en fin...nada que ver con los originales. Pero bueno, espero que la próxima vez salgan mejor, si es que hay próxima vez.

Y como remate de algo que me salió mejor en Halloween, os dejo unas fotillos de nuestro disfraz: mis amigos R., G. y yo nos vestimos de foto en blanco y negro, la verdad es que quedó gracioso ¿no?, ¡y la casa me quedó más mona!

¿Alguna idea para que salgan mejor?, ¿Lo habéis intentado alguna vez?, ¿Cómo habéis celebrado Halloween?